5 claves para crear vídeos con animaciones que emocionen
Los vídeos con animaciones no se pueden grabar de cualquier manera. Hay que cuidar su proceso de creación de manera más exhaustiva, incluso más o igual que el de los convencionales. Aquí tienes algunas de claves para poder conseguirlo.
Los vídeos con animaciones tienen cada vez más popularidad entre el público. Su visión es agradable, atraen la atención y, en muchos casos, si los creadores logran tocar la tecla adecuada, emocionan y llegan al corazón. Estos vídeos son los que más se recuerdan a la vez que ayudan a interiorizar la historia. Si de lo que se trata no es de un vídeo artístico, sino de un vídeo promocional, este ayudará a recordar mejor de qué producto, marca o servicio se habla en ellos. Por eso, empresas, agencias y estudios de diseño apuestan por crear vídeos con animaciones cada vez con más frecuencia. Si te interesa esta disciplina, echa un vistazo a nuestro Máster Online en Ilustración y Animación 2D / 3D.
Para la creación de este tipo de vídeos, hay que tener en cuenta todos los elementos posibles que pueden utilizarse en animación digital para captar la atención del público y causarles una buena impresión. Aquí tienes algunas de las claves para poder conseguirlo.
1. Crear vídeos con animaciones: la historia es fundamental
Para crear vídeos con animaciones que lleguen al corazón de quien los ve, tener una buena historia es básico y fundamental. Por eso, antes incluso de contactar con profesionales o ponerte con las primeras animaciones, tienes que pensar en la historia con calma.
La historia o el guion necesario para crear vídeos con animaciones debe planificarse y redactarse como si se tratase del de una película o un vídeo. Es decir: debes trabajar en su inicio, su trama y su desenlace. No puedes grabar un vídeo animado sin ton ni son, con escenas inconexas. Debe contar una historia que empiece, se desarrolle y termine en el vídeo, o al menos dentro de una misma serie de vídeos o capítulos. Solo si sigues esta observación conseguirás que los espectadores entiendan lo que quieres comunicar con el vídeo.
También puedes comenzar el vídeo utilizando distintos recursos para atraer al espectador. Por ejemplo, plantear preguntas sobre necesidades o problemas concretos que puedan tener y que el producto o servicio pueda solucionar. O, en el caso de contar una historia para niños, anunciar que vas a relatar un cuento. Es decir, hablar sobre qué hay en el vídeo.
2. Usa las animaciones necesarias: ni más ni menos
Cuando tengas listo el guion del vídeo, y tengas claro cómo iniciarlo de manera atractiva, llega el momento de plantear las animaciones que hay que crear. En este punto también debes tener un cuidado especial. Sobre todo, por dos motivos: el primero es que las animaciones tienen que respetar el guion escrito, y, el segundo, es que hay que utilizar estrictamente el número de animaciones necesarias.
¿Qué quiere decir esto? Pues que no hay que pasarse mostrando más animaciones de las que realmente hacen falta. De lo contrario, el espectador podría no darse cuenta de detalles en los que pretendes que se fije, porque desaparecen muy rápido. Tampoco hay que diseñar menos de las necesarias, ya que el vídeo podría resultar aburrido debido a la lentitud en el cambio de imágenes. Hay que encontrar un equilibrio. También, si se utiliza una voz en off como narración, tienes que asegurarte de que las animaciones guardan relación directa con lo que se está diciendo en cada momento.
3. Apóyate en la creatividad para marcar la diferencia
Para marcar la diferencia a la hora de crear vídeos con animaciones, tienes que intentar hacer algo distinto a lo convencional. No tiene por qué ser algo muy radical, pero sí algo que haga que quien vea el vídeo lo recuerde. Para ello, puedes apoyarte en la creatividad y utilizar la imaginación. Pero también deberás hacer varias pruebas con animaciones que tengan elementos diferenciales para encontrar el que realmente marca la diferencia y emociona a la gente.
Para dar con lo que necesitas e incluso encontrar inspiración, tienes tu mejor arma en Internet. En concreto, en los vídeos similares al que te propones realizar. En caso de ser un vídeo promocional o para una empresa, procura ver qué es lo que está haciendo tu competencia. En muchos casos te darán ideas y te servirán de inspiración.
4. La música también puede llegar al público
Además de utilizar una voz en off para narrar lo que suceda en el vídeo, o contar una historia, también puedes utilizar música en el vídeo. Y a diferencia de lo que pueda parecer, la música puede resultar un ingrediente esencial para causar una buena impresión entre quienes vean el vídeo. Por eso tienes que cuidar al máximo su selección. Eso sí, a no ser que quieras gastarte una fortuna en derechos de autor, tendrás que seleccionar música con licencia Creative Commons.
Encontrar la más adecuada te llevará un tiempo, aunque el resultado final merecerá la pena. A la hora de elegirlos, quédate con los que estén en sintonía con el tema del vídeo y las animaciones. No tiene sentido, por ejemplo, elegir un tema lento y melancólico para un vídeo alegre. Ni uno con música disco con animaciones en las que quedaría más adecuado un tema instrumental.
5. Facilita que el vídeo se comparta
Para que un vídeo sea un éxito, además de emocionar tiene llegar a mucha gente. Generalmente, cuando un vídeo gusta a una persona, suele querer compartirlo con sus familiares y amigos. Por lo tanto, tienes que dar facilidades para que pueda compartirse. Al crear vídeos con animaciones no hay que olvidarse de este detalle, por lo que hay que tener en cuenta ciertas consideraciones para que no resulte complicado compartirlo.
Si se trata de un vídeo corto, podrá compartirse directamente en redes sociales y a través de herramientas de mensajería sin problema. Pero si es más largo, es recomendable subirlo a plataformas como YouTube o Vimeo. Desde allí, quien quiera compartirlo podrá hacerlo mediante su enlace. O bien puedes preparar versiones más cortas del vídeo. Eso sí, esto solo es posible en determinados casos, así que, si van a desaparecer partes fundamentales de la historia, no lo hagas.
Estos son algunos de los ingredientes básicos a tener en cuenta para crear vídeos con animaciones. Los expertos en su grabación y planificación, formados específicamente para ello, cuentan con más recursos para conseguirlo. Además, lo hacen de manera profesional, por lo que su resultado causará una impresión más grata en su audiencia.