Del open space al mindfullness en las oficinas
Transición a una escala más humana.
Existen alternativa a trabajar en cubículos y espacios en los que no poderse concentrar. El proyecto de Infinity mind aparentemente parece ir en contra de todos los principios asociados a un buen diseño de oficinas (carencia de luz natural); pero la opción de reforzar la mirada interior creo fue una baza ganadora, teniendo en cuenta las características del local en el que se debía ubicar esta agencia de publicidad en Changsa.
Brutalismo en los acabados, paredes de hormigón ligero, rotas para crear los accesos a las diferentes salas; iluminación casi escenográfica dejando en la penumbra los espacios de paso y aumentando los luxes en las zonas de trabajo. La única nota de color está en las obras de arte. Un lugar por hacer para parir campañas innovadoras.
Por otra parte para diseñar la oficina de Äripäev el despacho de Architect11 se enfrentaba a las paredes desnudas de una fábrica que dejaban alturas de 12,6 metros y una planta libre de 63 x 38 metros; estas medidas exigían la creación de espacios de trabajo más acogedores, en la que la escala humana no se perdiera. Han aprovechado la luz natural provenientes de las claraboyas para los espacios más sociales, cafetería y librería y los espacios con altura más baja en el perímetro para los lugares de trabajo.
Existe la posibilidad de realizar reuniones en cubículos, con visión al exterior o en un mobiliario que parece envolvernos con su textura, bajando la reverberación y dotándola de un aire semiprivado; también por la proximidad al acotar el espacio para sentarse, no permitiendo que se muevan los participantes.
Fotografía Tönu Tonnell y Ba Songyang