Nuevos modelos para la gestión del diseño surgidos de la Covid-19
Durante el mes de noviembre, el Museu del Disseny de Barcelona presentó la exposición “Emergència! Dissenys contra la covid-19”.
Durante el mes de noviembre, el Museu del Disseny de Barcelona presentó la exposición “Emergència! Dissenys contra la covid-19”, una selección, organizada junto a ADI-FAD, de algunas iniciativas que, des del mundo del diseño, han intentado ofrecer una respuesta rápida a las necesidades más urgentes de la crisis sociosanitaria provocada por la pandemia.
Una crisis sobrevenida que ha hecho estragos entre la población, evidenciando las carencias de un modelo social, económico e industrial que se vio obligado a hacer una llamada a la solidaridad, para la fabricación doméstica de material sanitario con el que combatir la enfermedad. Una llamada a la que respondieron nuevos modelos de gestión y organización para el diseño de soluciones de emergencia.
En el artículo “10 diseños de emergencia para hacer frente al Coronavirus” ya hice una pequeña aproximación a algunos de los diseños que iban surgiendo, sin embargo, tanto el premio Adi Reconeix, como la exposición organizada por el Museu del Disseny, nos ofrecen la posibilidad de visualizar un poco más allá de los productos e identificar los modelos de gestión del diseño, los procesos de fabricación, o sectores en los que estas propuestas ofrecieron soluciones.
Imatge 1: Coronavirus Makers Catalunya. © Escola Llotja
1. Open Source
La falta de máscaras y mascarillas destinadas a los facultativos sanitarios, pero también a la población en general, encontró aliados en propuestas diseñadas según la materia prima y el proceso de fabricación disponible en cada situación. Así, por ejemplo, distintas iniciativas de diseños open source se compartieron entre la comunidad Maker para que todo aquel que dispusiera de una impresora 3D, la pusiera a trabajar.
También, desde el sector textil, se hicieron distintas llamadas para elaborar batas y mascarillas y, por ejemplo, en Barcelona, el Sindicato Popular de Vendedores Ambulantes convirtió su tienda en un taller de costura, sumándose a la iniciativa que la empresa RobinHat y el Ayuntamiento de Sentmenat coordinaron, junto con cientos de voluntarios, para la fabricación de mascarillas.
Imatge 2: La impresión para la fabricación de máscaras faciales. © Nagami
2. Impresión 3D
La impresión 3D se convirtió en un gran aliado para la fabricación de la mayoría de las iniciativas Opensource. Más allá de las evidentes carencias de este sistema, en tanto a la calidad como capacidad de producción masiva, su rapidez, disponibilidad por parte de sus usuarios (muchos de ellos confinados) y la cercanía con los espacios sanitarios, convirtieron esta herramienta en un gran aliado. También muchas empresas colaboraron con las múltiples iniciativas Open source que se fueron generando. Entre ellas, destaca la empresa Nagami, que puso a disposición el brazo robotizado con el que fabrican sus sillas.
Imatge 3: Máscaras respiratorias de ©Mos Design, a partir del modelo Easybreath de Decathlon.
3. Hackers
La crisis llevó al límite a muchos centros sanitarios. El colapso de las UCIs y la falta de respiradores para asistir a los pacientes se convirtió en uno de los mayores problemas. A partir de las máscaras de esnórquel, algunos diseñadores propusieron soluciones temporales que, aunque sin las necesarias homologaciones, pudieran servir, en caso de emergencia, como alternativa provisional.
Imatge 4: Respirador Oxygen. Una iniciativa de © protofy.xyz.
4. Dispositivos de ventilación
El confinamiento y paralización de gran parte de la industria, llevó también a la orientación de las cadenas de producción de algunas empresas, que decidieron colaborar con iniciativas para el desarrollo de diversos modelos de respiradores mecánicos. Proyectos algo más complejos, que surgieron de la colaboración interdisciplinaria entre ingenieros, diseñadores, sanitarios y responsables de producción y que contaron con el apoyo de grandes empresas industriales.
Imatge 5: Urbansimo táctico en Nueva York: © Aaron Asis
5. Elementos de desinfección y urbanismo táctico
En 1860, Barcelona encontró, con la planificación urbanística ideada por Ildefons Cerdà, una manera de esponjar e higienizar la antigua ciudad de entre murallas, completamente masificada por aquel entonces. Fue su manera de hacer frente a las constantes cuarentenas que periódicamente se imponían a la población para contener la expansión de enfermedades. A la espera de una vacuna, la higiene sigue siendo la principal herramienta que tenemos para hacer frente a la COVID-19, y por ello han surgido también propuestas que, de la mano de la tecnología, posibilitan limpiar con mayor seguridad los espacios que habitamos.
En este apartado destacan también toda la serie de iniciativas de urbanismo táctico que se han ido implementando en distintas ciudades del mundo para posibilitar un mayor distanciamiento físico, habilitando más espacio para el peatón en las calles.
Imatge 6: Micrashell, la propuesta disruptiva de © Production Club
6. Diseñando futuros
Más allá del golpe emocional que la crisis de la COVID-19 está ocasionando, la percepción de vulnerabilidad que está experimentando gran parte del mundo será, muy probablemente, el hecho que mayor impacto tenga en la definición de los nuevos escenarios que se dibujen a partir de ahora.
Nuevos escenarios que nos obligarán, como diseñadores, a replantear la relación con los objetos y los espacios, y a definir nuevos arquetipos formales que respondan a esta nueva realidad. A pensar en términos de comportamiento y relaciones sociales y a decidir si el futuro próximo deberá normalizar lo que, por ahora, es todavía excepcional.