Descubre por qué la usabilidad web y el diseño UX son cruciales para una experiencia de usuario óptima

¿Qué es la usabilidad de la web?

La usabilidad de la web se refiere a la facilidad con la que los usuarios pueden interactuar con un sitio web y navegar por él de manera eficaz e intuitva. En otras palabras, una página web con buena usabilidad es aquella que permite a los usuarios desplazarse por ella y lograr sus objetivos con poco esfuerzo y tiener una experiencia agradable.

En la actualidad, la usabilidad web se considera un elemento indispensable en el diseño de experiencia de usuario (UX), ya que busca mejorar la satisfacción del usuario. Pero además, está directamente relacionada con el posicionamiento SEO de la página. Es decir, que cuando mejor sea la usabilidad de una página, más puntos tendrá para ocupar una buena posición en los resultados de los buscadores.

Por eso, cuando un diseñador web y un desarrollador planifican la creación de una web, deben tenerla en cuenta junto con sus contenidos y su aspecto gráfico. Pero además de la navegación, la web también debe resultar atractiva y cómoda.

¿Por qué es importante la usabilidad web? Ventajas que aporta

Como hemos indicado, la usabilidad web impacta directamente en la experiencia del usuario al interactuar con un sitio web. Pero esta es tan solo una de las múltiples ventajas que ofrece a quienes apuestan por ella o por el diseño UX en general. De hecho, estos conceptos son fundamentales para quienes quieran trabajan en este campo, y por eso no faltan en nuestro Máster en Diseño Web Multidispositivo UX/UI. 

Otras ventajas que ofrece la usabilidad web son las siguientes:

• Satisfacción del usuario. Los usuarios pueden encontrar la información que buscan, realizar acciones y navegar de manera intuitiva, que se traduce en una experiencia más positiva.
• Retención de usuarios. Los usuarios suelen volver a páginas que encuentran fáciles de usar. Por tanto, la usabilidad contribuye a la fidelización de clientes.
• Conversión y cumplimiento de objetivos. Un sitio web con buena usabilidad facilita a los usuarios cumplir sus objetivos, ya sea realizar una compra, completar un formulario o cualquier otra acción. Esto, a su vez, se traduce en tasas de conversión más altas para la empresa. 
• Reducción de la tasa de rebote. Esta se refiere a la cantidad de personas que abandonan una web sin interactuar con ella. Suele deberse a una interfaz compleja o con dificultades que frustra a los usuarios. Si la web tiene en cuenta la usabilidad, dicha tasa se reducirá.  
• Mejora de la imagen de marca. Una página que apuesta por la usabilidad refleja profesionalidad y cuidado por los usuarios. Por tanto, la percepción de la marca mejora y se incrementa la confianza de aquellos.
• Ahorro de costes a largo plazo. Corregir problemas después de que una página está en activo resulta más complejo que apostar por un buen diseño UX desde el comienzo.  

¿Qué factores influyen en la usabilidad web?

En la usabilidad web influyen varios factores, pero sobre todo tres:

- Eficiencia. Mide el grado de satisfacción que experimentan quienes acceden a la página, en relación con las necesidades o expectativas que tenían cuando pensaron en acceder a su contenido.

- Eficacia. Valora si el internauta que navega por ella consigue alcanzar el objetivo que tenía al visitarla con mayor o menor rapidez.

- Satisfacción. Comprueba si el visitante estuvo a gusto y se encontró cómodo mientras veía la web y sus secciones.  

Cómo mejorar la usabilidad de una web

Para mejorar la usabilidad web, hay que tener siempre como referencia que el objetivo de la página es que quienes las visiten, encuentren lo que necesitan sin esfuerzo y en el menor tiempo posible. Esto implica trabajarla desde las primeras etapas del desarrollo web, y con varios factores en combinación: tecnología, diseño y contenidos. A este último se le conoce como UX writing. 

El diseño de la página tiene que permitir que el usuario siempre tenga claro en qué parte de la web se encuentra. Es decir, cómo ha llegado a la página concreta en la que está y cómo puede regresar al punto anterior. En diseño UX, se traduce en un menú visible con todas las partes de la web y con opciones de navegación claras, como los nombres de las secciones. 

En cuanto a los contenidos, estos deben estar bien organizados y estructurados. Para ello, se necesita una jerarquía concreta, y que esta se respete durante todo el desarrollo y la planificación de la web.

Otros elementos a mencionar son las imágenes y el contenido multimedia, los textos y los tipos de letra. Todos deben estar integrados y contribuir a la visualización y navegación sencillas. Las ventanas emergentes deben evitarse siempre que sea posible. 

Si la página tiene elementos que buscan la interacción con los visitantes, como los menús desplegables o los botones de descarga, estos deben ser intuitivos. La información tampoco debe ser repetitiva, y siempre debe aportar algo de valor. Todo lo que no aporte nada, sobra. 

Otro punto a destacar es que el diseño sea responsive. Es decir, que la web esté preparada para verse de manera correcta en cualquier tipo de dispositivo. Como ordenadores de sobremesa, portátiles, smartphones y tablets. Por último, debe haber una coherencia entre todos los elementos que se incluyan en la web, ya se trate del diseño en sí mismo como de los contenidos.  

¿Qué es la usabilidad en un texto digital?

Como ya mencionamos, la usabilidad web también se aplica a los contenidos o textos digitales. Al fin y al cabo, estos forman parte de las páginas e influyen en la experiencia del usuario. Y es que, hoy en día, esta última abarca todas las disciplinas y formatos digitales, y hasta en diseño gráfico se debe tener en cuenta la UX.

Si volvemos a los contenidos, la usabilidad se refiere a la facilidad con la que los visitantes de una web acceden y leen sus textos. Al escribirlos y maquetarlos también hay que dar facilidades a quienes los leen en pantalla. Por eso, hay que estructurarlos de manera que la idea más importante que se quiera transmitir en ellos aparezca en las primeras líneas. Las secundarias o menos relevantes pueden colocarse a continuación. 

Para mejorar la usabilidad de un texto hay que facilitar su legibilidad. Para ello, además de utilizar un tipo de letra claro, hay que utilizar negritas para destacar las partes más relevantes de un texto. De este modo, incluso si se lee por encima, se podrán coger las ideas principales. 

También, los párrafos deben ser cortos y, cuando tengas que hacer una relación de elementos, utiliza listas y viñetas. Usa títulos breves y procura que los textos no sean excesivamente largos. De lo contrario, los visitantes puede perder interés. Si te fijas en las redes sociales, lo que triunfa en general son los contenidos cortos y entretenidos. 

4 ejemplos de buena usabilidad web

AirBnB es uno de los mejores ejemplos de páginas que tienen en cuenta la usabilidad web. Nada más entrar en ella, queda claro de qué se trata en ella y qué es lo que puedes encontrar. Su diseño es claro y está bien estructurado. Los resultados de las búsquedas se presentan ordenados y clasificados, y tienes la posibilidad de filtrarlos en función de varios conceptos. Además, el diseño está adaptado a distintos dispositivos e introducen mejoras continuas para seguir facilitando la navegación.

La web de PayPal también destaca por su buena usabilidad. Cuenta con un diseño minimalista, pero muy eficaz. Cualquier persona que la visite, será capaz de encontrar lo que busca con mucha rapidez.

Otro ejemplo es la web de Asos. En concreto, además de resultar cómoda, detacasa por su asistente de tallas, que facilita enormemente a los clientes la búsqueda de los productos que necesitan. Por último, está la web de Duolingo. Desde ella, empezar a recibir clases de un idioma es un proceso rápido y sencillo. Solo necesitará tres clics para comenzar.

Pasamos a la experiencia de usuario: ¿Qué es?

Hasta ahora jhemos hablado de usabilidad web. Sin embargo, esta es tan solo una parte del diseño UX o experiencia de usuario. Esta última abarca todos los aspectos de la interacción de un usuario con un producto o servicio, no solo limitado a sitios web.

En cualquier caso, se ocupa de las emociones y percepciones que los usuarios experimentan al interactuar con los productos y servicios de una marca, y abarca aspectos estéticos, afectivos y cognitivos. Además, incluye todas las etapas del ciclo del usuario, desde la conciencia del producto hasta la compra y la fidelización.

Entonces, ¿qué es el diseño UX?

El Diseño Ux se define por su objetivo, que es la creación de productos de gran usabilidad que resuelvan necesidades concretas del usuario final. Su filosofía es conseguir en el usuario la mayor satisfacción posible empleando el menor esfuerzo. Cada decisión que se toma en el Diseño UX viene motivada por el usuario final. Por sus capacidades, necesidades, expectativas y objetivos.

Se trata pues de un diseño cuyo centro es el usuario y su percepción del producto final.

A lo largo de la historia, el diseño siempre ha tenido como objetivo convencer al usuario. Bien a través de la utilidad del producto, bien a través de la belleza o bien mediante ambas. La diferencia en el Diseño UX es que este va un paso más allá: a través de la percepción estética y de la usabilidad se atacan frentes como la diversión y el placer. Ambos forman parte de una experiencia de usuario satisfactoria.

El profesional del diseño UX

Así como un diseñador de interiores o un diseñador editorial necesitan comprender la teoría del color o cómo afecta a los clientes finales la distribución de un espacio, un profesional del Diseño UX debe comprender en profundidad la psicología del ser humano. Por tanto, deben conocer al usuario final, ya que su labor está relacionada con la creación de emociones, conceptos y escenarios, más que con la fabricación del producto.

De hecho, una parte importante de la labor del diseñador UX es investigar sobre los usuarios finales para comprender qué necesitan. Con la extracción de la información necesaria, podrá crear productos cuya usabilidad derive en una experiencia de usuario perfecta. Este proceso puede llegar a ser tan complejo, que hoy en día, hay diferentes cursos y formaciones para aprender a incorporar la experiencia del usuario en múltiples ámbitos. Por ejemplo, los de User Experience (UX) and Design Thinking.

El proceso del diseño UX

La base del Diseño UX es la comprensión de la experiencia final del usuario. Pero no únicamente en cuanto a la estética y la funcionalidad del sitio web. Cuando un cliente pide un diseño web, lo hace con peticiones concretas. Pero, antes de atender esos requisitos iniciales, el diseñador UX debe comprender el negocio y las necesidades de los usuarios finales de ese negocio.

Puesto que se requieren conocimientos avanzados y experiencia en este ámbito, existen listados de los principales creadores para poder contactarlos. Así sucede en los EE.UU., donde hay webs con las mejores agencias de diseño UX en USA. 

Una experiencia de usuario completa crea usuarios felices y permite al diseñador cobrar precios más altos por sus servicios. Si te interesa conocer a fondo los entresijos del Diseño UX, echa un vistazo a nuestra oferta formativa para diseñadores web.