Entornos saludables que nos ayudan a sanar mejor nuestro cuerpo
La definición de entorno saludable todavía no está del todo clara, y se trata de un concepto en constante evolución. Pero generalmente se trata de un espacio beneficioso para el desarrollo y bienestar de las personas, libre de elementos que puedan resultarle dañinos, tanto para su salud física como mental.
¿Qué es un entorno saludable a la hora de sanarse?
La definición de entorno saludable todavía no está del todo clara, y se trata de un concepto en constante evolución. Pero generalmente se trata de un espacio beneficioso para el desarrollo y bienestar de las personas, libre de elementos que puedan resultarle dañinos, tanto para su salud física como mental. La ausencia de estos también colaborará a la hora de propiciar su curación si se encuentra enfermo.
Los entornos saludables cuentan con los elementos básicos para que nuestra salud sea la mejor posible, tanto a nivel físico como mental. Pero, también, para que seamos felices y contemos con bienestar a todos los niveles. Eso quiere decir que el aire que respiramos o el agua que bebemos serán saludables si están libres de contaminantes. Sin embargo, estos son solo algunos de los aspectos a tener en cuenta para poder considerar si un entorno es saludable o no.
En relación con los entornos saludables, también cabe preguntarse qué puede abarcar este tipo de entorno. Porque no se limitan a la residencia de las personas. Un entorno saludable se extiende desde las viviendas de las personas hasta su barrio y su localidad, e incluye los lugares de estudio y trabajo. Pero, además, los espacios en los que se desarrolla su tiempo libre.
Entorno saludable: los principios básicos
Entre los principios básicos para que una persona cuente con un entorno saludable está, como hemos mencionado, respirar aire sin contaminantes. También tener acceso a agua limpia y sin contaminar. Además, tiene que contar, tanto en su vivienda como en su lugar de estudio y trabajo con un ambiente libre de elementos tóxicos. Es decir, en las estancias en las que vive o desempeña su trabajo o estudia no pueden haber pinturas contaminantes o aire viciado. Pero tampoco pueden estar mal aisladas a nivel térmico o acústico.
Se considera entorno saludable también a aquel que nos rodea cuando salimos de nuestras viviendas, y no tiene contaminación lumínica ni visual. Es decir, que no tiene un exceso de luz artificial, ni tiene elementos que estorben a la vista, como vallas o cartelería en exceso.
Los alimentos también forman parte del entorno, y para que puedan contribuir a que sea saludable no tienen que estar contaminados con tóxicos. Además, tienen que ser suficientes para proporcionar bienestar y buena salud.
Asimismo, para un entorno saludable también es necesario contar con una infraestructura sanitaria suficiente. De esta manera las personas podrán cuidar de su salud y recuperarse de la mejor manera posible cuando caigan enfermas.
Los espacios saludables cerrados, que forman parte de un entorno saludable, tienen que tener unos niveles de temperatura y humedad adecuados. También tienen que estar limpios, lo que evita que las personas estén expuestas a productos químicos y suciedad. Por otro lado, tienen que contar con las medidas adecuadas de seguridad, como alarmas de humos, medidores de CO2 o protectores en ventanas.
También es imprescindible que los interiores se revisen para evitar situaciones en las que las personas se puedan golpear o resultar heridas. Y que se ventilen de manera periódica y adecuada para sacar de ellas el aire que esté viciado y entre el exterior. Con la ventilación también contribuirás a regular su nivel de humedad y temperatura.
Estos espacios tienen que ser accesibles, para que las personas mayores y las que tienen movilidad reducida o alguna discapacidad visual o sensorial puedan moverse con ellas con comodidad y sin esfuerzo. Además tienen que estar aislados debidamente para evitar que entre ruido del exterior.
Entorno y espacio saludable: ejemplo
Un ejemplo de entorno saludable es un vivienda construida siguiendo unos criterios de respeto con el medio ambiente, y que cuente con un aislamiento acústico y térmico de buena calidad. También tiene que tener unos ventanales que garanticen una entrada suficiente de luz natural, y un sistema de calefacción y otro de refrigeración lo más respetuosos posibles con el medio ambiente.
En su construcción no se habrán empleado materiales tóxicos, con especial atención a las pinturas, y estará adaptada para personas con movilidad reducida. Su diseño se ha realizado teniendo en cuenta la necesidad de contar con una ventilación adecuada, y tanto sus ventanas como sus puertas están protegidos para evitar accidentes. Es un espacio que promueve, por tanto, la salud y el bienestar de sus habitantes.
Fotografías: Victòria Gil y Borja Ballbé (Hospital Sant Joan de Deu), Alex de Rijke, Jasmin Sohi,, Tony Barwell (Maggie Oldham) y fotomontajes renders 3XN.