¿Qué es un plano urbano y para qué sirve?
Seguro que alguna vez has visto alguno. Pero hoy queremos ir un poco más allá y hablar de qué es un plano urbano y para qué sirve exactamente.
Es bastante probable que en más de una ocasión hayas visto uno. En este artículo, no solo queremos hablarte de qué es un plano urbano, sino también de para qué sirve exactamente.
Se trata de un elemento fundamental para el correcto desarrollo de una ciudad, así como para su evolución sostenible. Sin él, la ciudad estaría creada a su suerte, puesto que no se tendrían en consideración ninguno de los aspectos que la hace habitable o que la convierte en un organismo vivo.
Veamos un poco más en profundidad todo esto.
¿Qué es un plano urbano?
Un plano urbano es una representación gráfica y detallada de la distribución y disposición de las calles, edificaciones, espacios públicos y otros elementos en una zona urbana o ciudad. Este documento cartográfico proporciona información esencial para entender la estructura y organización de un entorno urbano, con el objetivo de facilitar la orientación y la planificación urbana.
Podríamos decir que recoge el diseño de la ciudad y que regula cómo se usará en ella el espacio físico y las funciones, teniendo siempre en cuenta cuál será el impacto social de dicho entorno.
Los planos urbanos suelen incluir datos cruciales como la ubicación de avenidas, calles, plazas, parques, edificios gubernamentales y comerciales, así como la infraestructura de transporte, como estaciones de tren o paradas de autobús. Además, pueden contener información topográfica, como elevaciones y cuerpos de agua, que influyen en la disposición de la ciudad.
Estos mapas son herramientas fundamentales para urbanistas, arquitectos y autoridades locales en la toma de decisiones relacionadas con el desarrollo urbano, la gestión del tráfico, la zonificación y la preservación de áreas históricas. Además, los planos urbanos son esenciales para el diseño de ciudades eficientes, sostenibles y funcionalmente integradas.
Un poco de historia
Las primeras muestras de representaciones gráficas de ciudades se encontraron en el Antiguo Oriente Próximo, elaboradas en tablillas de arcilla y con una antigüedad de más de 3 mil años. De la Edad Media, proceden manuscritos, libros impresos y cartas náuticas, con paisajes urbanos en forma de pictogramas.
En el Renacimiento, se ampliaron los conocimientos sobre las proyecciones y las perspectivas matemáticas. Estos repercutieron en el trabajo de los cartógrafos y modificó la producción de los paisajes urbanos, sobre todo en países como Italia. Una de las principales innovaciones fue que la representación pasó de ser una perspectiva imaginaria o real a un plano bidimensional. Este, con un proceso de dibujo en perspectiva, se convertiría en una imagen tridimensional.
Ya en el siglo XX, con el crecimiento urbano acelerado, la planificación urbana evolucionó para abordar desafíos como la movilidad, la vivienda y la sostenibilidad. Hoy en día, la tecnología digital ha revolucionado la elaboración de planos urbanos. Esta permite una representación detallada y accesible para la planificación y gestión eficientes de las ciudades y se adapta a las necesidades actuales, que avanzan hacia las llamadas smart cities.
¿Qué diferencia hay entre plano urbano y mapa urbano?
Aunque estos términos puedan parecer equivalentes, hay diferencias entre ellos. La primera es el nivel de detalle y de enfoque. Un plano urbano es una representación detallada y específica de una zona urbana. Incluye información precisa sobre la disposición de calles, edificaciones, espacios públicos y otros elementos de la ciudad. Estos planos suelen ser utilizados por urbanistas, arquitectos y autoridades locales para la planificación y el diseño urbano, puesto que permiten destacar detalles específicos de la infraestructura y de la distribución de la ciudad.
Un mapa urbano, por el contrario, tiene un enfoque más general. Si bien puede incluir información sobre calles y lugares destacados, no suele proporcionar el mismo nivel de detalle que un plano urbano. Estos se suelen emplear para la orientación general y la visualización de la distribución geográfica de la ciudad en términos amplios.
Tipos de planos urbanos
Dentro de la representación de las calles, infraestructuras y elementos urbanos podemos encontrar cuatro clases diferentes de plano urbano.
Plano cuadricular, ortogonal o en forma de damero
Esta tipología de plano es la más antigua, y ha sido atribuida durante mucho tiempo a Hipodamos de Mileto, un constructor griego.
Se trata de un tipo de disposición urbana caracterizado por calles que se cruzan en ángulos rectos, formando una red regular de cuadrículas. Este diseño facilita la orientación y la planificación eficiente. Históricamente, se utilizó en ciudades como la antigua Roma y Pompeya, pero experimentó un resurgimiento durante el Renacimiento y se convirtió en un elemento distintivo en la planificación urbana de ciudades como Nueva York y Chicago.
Si bien la disposición cuadricular ofrece ventajas para el desarrollo ordenado y la expansión modular de las ciudades, porque sus manzanas son regulares. Sin embargo, en la actualidad, sus ángulos no favorecen la buena visibilidad en los cruces, y debido a la densidad del tráfico, no son adecuados para las necesidades actuales de las ciudades.
El plano lineal
Un plano lineal es un tipo de disposición urbana caracterizado por el desarrollo lineal y alargado de las estructuras y elementos urbanos. A diferencia de los diseños cuadriculados, sigue una dirección predominante, ya sea a lo largo de una costa, una carretera principal o una línea geográfica.
Este tipo de planificación urbana se adapta especialmente a entornos geográficos específicos y puede encontrarse en ciudades costeras, a lo largo de ríos o en áreas montañosas. La disposición lineal favorece la conexión con elementos naturales y la optimización del uso del terreno en áreas alargadas.
Plano irregular
Un plano irregular en la planificación urbana se refiere a una disposición no uniforme y sin patrones geométricos regulares en la distribución de calles y edificaciones. A diferencia de los planos cuadriculados u ortogonales, el plano irregular se adapta a la topografía del terreno o se desarrolla de manera más orgánica, y sigue contornos naturales o históricos.
Este enfoque flexible puede resultar de factores geográficos, históricos o culturales, y crea una estructura urbana más diversa y única. Ciudades antiguas o aquellas con una evolución histórica compleja a menudo exhiben planos urbanos irregulares.
Plano radiocéntrico
Un plano radiocéntrico en la planificación urbana se caracteriza por tener un diseño que irradia desde un punto central. Este enfoque implica que las calles y las diferentes estructuras se disponen radialmente, por lo que se extienden en líneas que parten de un punto focal.
Este tipo de diseño es común en ciudades con una zona central importante, como plazas o monumentos, desde los cuales se originan las principales arterias. Este formato facilita la orientación y la accesibilidad desde el centro hacia las áreas circundantes. Ejemplos históricos incluyen la disposición de ciudades medievales o la planificación de algunas ciudades planificadas en el siglo XIX.
A modo de resumen
Hemos visto que un mapa y un plano urbano son conceptos de representación diferentes, siendo el último la forma representativa urbana más realista. El motivo es que el plano muestra la ciudad a escala realista, e indica en él todos los elementos con los que la ciudad está equipada. Por ejemplo, sus calles, edificios, parques, etc. Gracias al plano urbano, la ciudad puede plantearse de forma sostenible para que pueda evolucionar y crecer.
La cuestión es que hoy más que nunca es fundamental para los organismos encargados de esta tarea contar con profesionales que sepan cómo hacerlo, y para ello, esos expertos deben contar con la formación necesaria. Solamente así serán capaces de realizar planos urbanos que sean fieles a la realidad.
En ESDESIGN contamos con un Máster en Paisajismo y Urbanismo Sostenible, que te aportará todos los conocimientos que necesitas para la representación de ciudades y su desarrollo sostenible.