¿Qué es la creatividad en en el mundo del diseño y cómo trabajarla?

Podemos definir la creatividad como aquella capacidad que nos permite generar ideas para encontrar una solución adecuada a un determinado problema, y al diseño, como la vehiculación del proceso creativo con la finalidad de configurar productos útiles y bellos.

Pero, a veces, el diseño -o su mala praxis- ha contribuido a banalizar el propio concepto de creatividad. La creatividad es un proceso intelectual que actúa de manera lógica, procesando losdatos disponibles en primera instancia y, cuando los datos iniciales no consiguen una solución satisfactoria, activando una segunda fase que tiene como fin encontrar una solución innovadora.

Para diseñar correctamente, deberemos disponer del máximo número de datos posible. Ello implica recursos de toda índole, pero también y especialmente ser conocedores de todas las soluciones inicialmente previstas para solventar un problema parecido al que nos encontramos. No disponer de estos datos nos puede llevar precipitadamente a la segunda fase del proceso creativo y a la posibilidad de plantear soluciones aparentemente innovadoras pero que realmente no lo son.

Juicy Salif, diseño de Philippe Starck para Alessi, 1990.

En 1990, Alessi inició lo producción de Juicy Salif: un exprimidor diseñado por Philippe Starck, fabricado en aluminio pulido y que reinterpretaba la forma de exprimir un cítrico. El objeto, sin embargo, no funciona bien; es poco estable y derrama el jugo fuera del espacio previsto. Una mala solución que con el pretexto de la innovación formal, banaliza el proceso creativo. Aún así, se ha convertido en uno de los más apreciados iconos del diseño.

¿Qué es la creatividad en diseño publicitario?

En diseño publicitario, la creatividad consiste en la puesta en marcha de una estrategia que tiene como fin la transmisión de una idea o mensaje, o de varios, a través de los elementos gráficos que componen una campaña o una acción de publicidad. 

La creatividad en diseño publicitario es el ingrediente básico para conseguir que los contenidos y conceptos que formarán parte de la publicidad que se diseña sea lo más original y atractiva posible. Gracias a esto, además de atraer la atención de quienes vean la publicidad en cuestión, se consigue generar la diferenciación de una marca, un producto o un servicio. También distinguirlos de su competencia directa. Y si está bien hecha, atraer y agradar a la clientela y a los posibles compradores y suscriptores. 

No olvides que el fin de toda campaña o acción publicitaria, además de dar a conocer un producto o servicio, es fomentar su compra o suscripción. Por esto, la creatividad cumple un doble papel en el diseño publicitario. Por un lado tiene que llamar la atención de quien la ve. También tiene que ser eficaz y mover a la compra o suscripción. 

Pero además de estos fines, la creatividad en el diseño publicitario tiene otros papeles. Por ejemplo, mediante nuevos diseños en publicidad las marcas buscan llegar a más público y hacer que conecten con ellas. Pero también transmitir valores, provocar emociones e impactar en la audiencia.

La importancia de la creatividad en el mundo del diseño 

En el diseño, la creatividad también tiene un papel muy destacado. De hecho, uno de los pilares del diseño es tener ideas originales a las que dar vida. Es algo que los diseñadores tienen que hacer constantemente; por eso, es imprescindible que sean creativos en su trabajo, a diario. Sin ella, es imposible que consigan idear buenos proyectos. También, porque se sentirán más cómodos y capaces. Gracias a la creatividad no solo trabajarán más, sino que lograrán hacerlo mejor. 

La creatividad no es algo que sea inagotable; tampoco algo que no pueda desarrollarse, al contrario. Un diseñador tiene que estar siempre en busca de elementos que la estimulen y hagan que se desarrolle. De esta manera, el diseñador tendrá más sencillo dar con ideas que llamen la atención y sean rompedoras para llegar a la audiencia.

¿Cómo podemos trabajar la creatividad en el diseño?

Para trabajar la creatividad en el diseño se pueden utilizar diferencias técnicas. La principal, eso sí, es estar formándose continuamente. El diseño es una disciplina que no deja de cambiar y evolucionar; por lo tanto, estar al tanto de todas las técnicas de diseño, así como de las principales tendencias, fomenta la creatividad, porque el diseñador consigue más recursos para dar vida a sus ideas.

Pero además hay otras técnicas que se pueden utilizar para mejorar y trabajar la creatividad. Una de las más utilizadas, e increíblemente popular en muchas áreas del mundo de la educación y la empresa, es el brainstorming. Consiste en elaborar una relación de ideas relacionadas con un tema, sin filtro y casi sin pensar. Al terminar la lluvia de ideas, los conceptos e ideas anotadas pueden servir para que el diseñador encuentre la inspiración. 

Los mapas mentales, plasmados en papel, también pueden ayudar. En este caso, mediante la anotación de los distintos elementos o partes de un proyecto, o de una campaña con elementos gráficos. Cada uno de ellos corresponderá a una idea que tiene el diseñador en la cabeza. Con este tipo de mapa, el profesional puede entrenar su creatividad, relacionando ideas e incluso dividiéndolas en varios conceptos. 

El método Scamper es otro camino que se puede elegir para trabajar la creatividad en diseño. Con este método se entrena el pensamiento creativo, y está basado en siete acciones, una por cada letra de la palabra Scamper: sustituir, combinar, adaptar, modificar, poner en otra situación o uso, eliminar y reorganizar. Con este método, partiendo de una idea y de unos primeros esbozos, se pueden clasificar y elegir los más adecuados para llegar a los que compondrán el diseño final. 

Además de estas técnicas, quizá más formales y propias de un estudio de diseño, hay varios métodos y trucos que puedes utilizar para entrenar la creatividad. Por ejemplo, llevar siempre un cuaderno de bocetos y material para dibujar encima. Nunca se sabe cuándo va a aparecer algo inspirador, o vas a tener una idea. Por eso es conveniente tener siempre material de dibujo a mano.

Aunque parezca lo contrario, conocer al dedillo las reglas del diseño consideradas como básicas, como las del color y las proporciones, te ayuda a aterrizar ideas y diseños. Así hay más facilidades para el diseño, y para adaptar la creatividad a lo establecido. Eso sí, también para romper con ello.