Algunos tipos de perspectiva en dibujo técnico que te sorprenderán

En el dibujo técnico, la perspectiva es una herramienta que se utiliza para comunicar ideas complejas en planos que necesitan ser muy claros y precisos. A diferencia de las representaciones artísticas, en las que tiene más peso la interpretación y el estilo personal, el objetivo en el ámbito técnico es transmitir información dimensional que sea exacta y que resulte comprensible.

En este artículo, veremos diferentes tipos de perspectiva que se usan para representar objetos tridimensionales en superficies bidimensionales de forma eficiente. Este concepto es imprescindible dominarlo si se desea trabajar creando ilustraciones. Si este es tu objetivo, te puede interesar cursar nuestro Máster en Ilustración y Animación. 

¿Qué es la perspectiva y por qué es importante?

La perspectiva es una técnica de representación visual que permite proyectar un objeto tridimensional en una superficie bidimensional. De este modo, se crea la ilusión de profundidad y espacio. Su objetivo es simular la forma en que el ojo humano percibe la realidad. Esta implica que los objetos más cercanos se ven más grandes y los más lejanos, más pequeños.

La percepción de distancia y volumen se utiliza en campos como el arte, la ilustración, la arquitectura, la ingeniería y el diseño industrial. En todos ellos, se requiere que las representaciones sean precisas y claras. Para conseguirlo, y como veremos en los próximos apartados, existen distintos tipos de perspectivas. Por ejemplo, la isométrica, la caballera o la lineal; cada una con sus características y usos. 

En cuanto a la importancia de la perspectiva, es necesario para poder comunicar ideas complejas de manera intuitiva. Los dibujos resultan más realistas y comprensibles, y en el caso de que se usen en ámbitos profesionales, transmiten información detallada sobre el espacio o sobre un objeto. Esto es, que quien observa podrá interpretar con facilidad las proporciones, el volumen y la ubicación espacial de los elementos representados.

Su origen como técnica formal de representación tridimensional en una superficie bidimensional la encontramos a manos del arquitecto Filippo Brunelleschi (1377-1446). Realizó las primeras investigaciones sistemáticas sobre perspectiva lineal y demostró el principio del punto de fuga, responsable de la ilusión de profundidad cuando las líneas convergen en un solo punto en el horizonte. Más adelante, las reglas básicas de la perspectiva las desarrollaría Leon Battista Alberti (1404-1472). 

Tipos de perspectiva en dibujo técnico

Los diferentes tipos de perspectiva se usan en dibujo técnico en función de las necesidades o el objetivo. Pero también son relevantes en otros campos, como en los distintos tipos de ilustración. A continuación vamos a ver las características de las perspectivas más destacadas y para qué se utilizan. 

Perspectiva lineal

La perspectiva lineal es un sistema de representación que proyecta objetos tridimensionales en una superficie bidimensional. Simula la forma en que el ojo humano percibe la profundidad y la distancia. Este tipo de perspectiva se basa en el principio de que las líneas paralelas parecen converger hacia un punto en el horizonte a medida que se alejan del espectador. Es el punto de fuga que mencionamos, y las líneas de los objetos parecen dirigirse hacia él. 

Sin embargo, los objetos no están a la misma escala, sino que se ajustan las dimensiones en función de la distancia. El punto de fuga va en el horizonte y representa el nivel de la vista de quien observa, aunque pueden ser hasta tres. En función de cuántos sean estos y de la orientación de los elementos, habrá distintos grados de profundidad y complejidad. Si bien ya los hemos ido mencionando, sus cinco principios geométricos son los siguientes:

Línea del horizonte

La línea del horizonte es una línea imaginaria que representa el nivel de los ojos del observador en la perspectiva lineal. Define el límite visual entre el cielo y la tierra, y en ella se colocan los puntos de fuga. La altura a la que se coloque influye en la perspectiva, ya que determina desde dónde se observa un objeto: al nivel de los ojos, desde arriba o desde abajo.

Punto de fuga

Como hemos dicho, el punto de fuga es el punto en la línea del horizonte hacia el que convergen todas las líneas paralelas de un objeto al alejarse. Crea la ilusión de profundidad e influye en la orientación de los objetos.

Líneas de convergencia

Las líneas de convergencia son aquellas que parten desde el objeto y parecen dirigirse al punto de fuga en la línea del horizonte. Logran un efecto de profundidad realista porque simulan que los objetos van reduciendo su tamaño a medida que se alejan de la persona que observa.  

Profundidad y altura del punto de fuga

La profundidad y altura del punto de fuga determinan la distancia aparente y el ángulo desde el cual se observa el objeto. Cuanto más bajo esté el punto de fuga, más cerca parecerá estar el observador del suelo, mientras que un punto de fuga alto da la impresión de una vista desde arriba.

Líneas paralelas

En perspectiva lineal, las líneas paralelas en un objeto o escena convergen visualmente en el punto de fuga. Aunque en realidad son paralelas en el espacio, el hecho de que parezca que se dirigen a un mismo punto refuerza la profundidad y el volumen en la imagen.

Perspectiva frontal

La perspectiva frontal, o de un punto, es un tipo de perspectiva lineal en la que quien observa está de frente al objeto o la escena. De este modo, todas las líneas paralelas que se alejan del observador convergen hacia un único punto de fuga, que se sitúa en el centro de la línea del horizonte.

En esta disposición, las caras del objeto que están orientadas hacia el observador se ven de frente y en proporción. Pero las dimensiones que se alejan, se reducen en dirección al punto de fuga. Se emplea en edificios o pasillos, en los que importa la simetría y la profundidad central de la imagen. Es útil porque simplifica la profundidad y facilita la organización de los elementos. Sin embargo, limita la percepción de complejidad espacial porque no incluye ángulos laterales visibles.

Perspectiva oblicua

La perspectiva oblicua, o perspectiva caballera, representa cada uno de los planos del objeto en posición frontal, mientras que las dimensiones de profundidad se proyectan en un ángulo, generalmente de 45 grados. Con este se consigue un efecto tridimensional. A diferencia de la perspectiva lineal, las líneas que representan la profundidad no convergen, sino que se mantienen paralelas. Es decir, que no se distorsionan las dimensiones originales de profundidad. Por ello, se usa en ingeniería y diseño técnico, así como en esquemas y planos mecánicos.

Su ventaja principal es la claridad en las proporciones y detalles, que facilita la interpretación y medición de las dimensiones de cada eje. No obstante, no es del todo realista en términos visuales. 

Perspectiva cónica

La perspectiva cónica o de punto de fuga simula con mayor realismo la forma en que nuestro ojo percibe la profundidad y la distancia. Este método utiliza hasta tres puntos de fuga, que se colocan en la línea del horizonte. Hacia él convergen las líneas paralelas del objeto, a medida que se alejan del observador. Las dimensiones y proporciones disminuyen gradualmente en dirección a estos puntos, y crean una ilusión muy marcada de volumen y espacio.

Se usa en representaciones artísticas y arquitectónicas, así como en ilustración vectorial, porque necesitan ser realistas. Por ejemplo, en paisajes, interiores y escenas urbanas. Sin embargo, este uso varían según los puntos de fuga que emplee. Si es uno, la perspectiva es adecuada para representar elementos frontales. Si son dos, para objetos con ángulos visibles desde dos direcciones; y si son tres, para vistas dinámicas o en altura, como edificios observados desde un ángulo elevado o bajo. 

¿Cuáles son los principios de la perspectiva?

La perspectiva se emplea para representar de manera realista las tres dimensiones en un espacio bidimensional. Su comprensión se basa en varios principios. El primero es el punto de vista, que se refiere a la posición del observador en relación con la escena. Se debe determinar antes de planificar una composición. 

Otro principio es la línea del horizonte, que representa la altura a la que se sitúa la vista del observador. En el dibujo y la pintura, esta línea es donde el cielo parece encontrarse con la tierra o el mar, pero se debe considerar como una línea imaginaria que puede variar según la altura del observador. Su ubicación cambia la percepción de la profundidad y la escala de los objetos representados.

Por otra parte, dentro de los distintos tipos de perspectiva, existen subcategorías que permiten diversas interpretaciones visuales. Por ejemplo, la perspectiva caballera, que es una forma específica de perspectiva oblicua que simplifica la representación de objetos, para que su visualización sea clara y técnica, pero sin perder la noción de las dimensiones tridimensionales. 

Dominar los principios de la perspectiva es importante en diferentes profesiones y áreas. No solo en aquellas artísticas, sino también en el ámbito técnico, como el dibujo, la arquitectura o el paisajismo urbano. Sin embargo, además de los conocimientos teóricos, hay que saber llevarlos a la práctica. En ESDESIGN ofrecemos formación en diferentes ramas del diseño. Consulta nuestros cursos y másteres y elige el que más se adapte a tus necesidades.