Marketing estratégico: todo lo que debes saber si eres autónomo

Trabajar por cuenta propia en nuestro país es una tarea ardua, ya que desde las propias instituciones no lo ponen fácil para emprender y salir adelante. Pero además de este desafío, hay que añadir la propia saturación y competitividad en los mercados. Por suerte, hay herramientas a nuestro alcance para que conseguir clientes sea más sencillo y eficaz. Es el marketing estratégico, y en este artículo, te contamos en qué consiste y cómo adaptarlo a cada perfil de profesional o negocio.

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¿Qué es el marketing estratégico?

Comenzamos por las definiciones. El marketing estratégico es un enfoque a largo plazo que se centra en la planificación y en el desarrollo de estrategias de marketing efectivas. Estas permitirán a la organización en cuestión alcanzar sus objetivos y metas comerciales.

Para ello, se sirve de diversos métodos, como el análisis del mercado, la comprensión de la clientela y la competencia o el desarrollo de planes de marketing que se alineen con los objetivos generales de la empresa, entre otros. A continuación vamos a verlos con mayor detalle.

Análisis personalizado del mercado

Implica comprender el nicho de mercado en el que se opera, con sus características determinadas. Aquí se incluye comprender las necesidades y deseos únicos de su clientela, así como también entender a la competencia local y las tendencias relevantes en su área de trabajo.

Segmentación del público objetivo

Equivale a identificar grupos específicos que comparten características similares. De este modo, se pueden comprender con mayor facilidad las características demográficas, psicográficas y de comportamiento de la clientela potencial para adaptar su oferta a sus necesidades particulares.

Selección estratégica del público objetivo

Después de la segmentación, se seleccionan los segmentos de mercado en los que centrarse. Esta selección implica elegir grupos que estén alineados con la experiencia y habilidades concretas, así como que tengan un potencial de crecimiento sostenible para una persona autónoma.

Posicionamiento personalizado

Desarrollar una imagen personal que resuene con la clientela. Por ejemplo, destacar sus habilidades únicas, la experiencia y el enfoque personal para diferenciarse en el mercado. Crear una reputación sólida y de confianza es fundamental para establecer relaciones sólidas con el público objetivo.

Desarrollo de ofertas específicas

Crear productos o servicios personalizados que satisfagan las necesidades específicas de los segmentos de mercado seleccionados. Para ello, hay que adaptar las habilidades y servicios para abordar los problemas y deseos particulares.

Estrategias de marketing mix

Determinar las estrategias adecuadas para el producto o servicio, el precio, la distribución y la promoción. Estos cuatro elementos conforman el llamado marketing mix. Los cuatro se combinan de manera coherente para influir en las decisiones de compra de las personas consumidoras y lograr los objetivos que se persiguen. Deben adaptarse al presupuesto y los recursos disponibles.

La distribución hace referencia a las vías disponibles para hacer llegar los productos o servicios a la clientela final. Y dentro de la promoción, figuran todas aquellas estrategias de marketing que pretenden informar, persuadir y recordar al público una marca. Por ejemplo, el diseño y el marketing, las redes sociales, la participación en eventos locales o las colaboraciones con profesionales del mismo sector u otro complementario.

En todas ellas se debe analizar el comportamiento de la audiencia y cómo reaccionan ante diferentes estímulos. Y es que la mayoría de las decisiones que tomamos no son completamente racionales, sino que hay una parte inconsciente. Este estudio entra dentro del neuromarketing.

Dentro del contexto del marketing mix, la construcción de la marca es esencial para establecer una identidad sólida en la mente de la audiencia. Las posibilidades son múltiples, y van desde el marketing de contenidos hasta el marketing olfativo.

Evaluación y ajuste

Monitorizar constantemente la efectividad de las estrategias implementadas y tener la capacidad de reajustarlas cuando no se avanza en la dirección deseada. Se deben analizar datos como el retorno de inversión (ROI) de las campañas promocionales y recopilar comentarios de la clientela para adaptar las ofertas y las estrategias de marketing según sea necesario.

¿Es lo mismo marketing estratégico y operativo?

Dentro del marketing hay una infinidad de conceptos que pueden parecer similares, pero como en este caso, no lo son. El marketing estratégico y el operativo no son lo mismo, incluso cuando se aplican a una persona autónoma. Aunque ambos están relacionados y se complementan entre sí, tienen enfoques y objetivos diferentes.

Como ya indicamos, el marketing estratégico se centra en la planificación a largo plazo y en la toma de decisiones fundamentales para alcanzar los objetivos marcados. Para una persona autónoma, esto podría significar aumentar la base de la clientela, expandir el alcance geográfico o diversificar los servicios ofrecidos.

Por el contrario, el marketing operativo se enfoca en la implementación de las estrategias delineadas en el estratégico. Es decir, establecer acciones más sencillas y concretas que son las que permitirán alcanzar las metas generales.

Algunos ejemplos de estas acciones son la promoción de los servicios de la persona autónoma, la gestión de un perfil en las redes sociales, publicidad en línea, email marketing o la participación en eventos locales. Todas ellas permiten atraer nuevas personas, retenerlas y generar ventas en el día a día. Progresivamente, irán desembocando en los objetivos generales.

Plan de marketing personalizado

El análisis detallado del mercado y la comprensión profunda del público objetivo permiten desarrollar un plan de marketing personalizado. Este plan se convierte en la hoja de ruta para todas las actividades de marketing estratégico que mencionamos. Como seleccionar, por ejemplo, los segmentos de mercado adecuados y posicionar los servicios de manera distintiva.

El plan de marketing detalla las estrategias específicas para llegar a los perfiles seleccionados a través de canales de promoción adecuados y acordes con el presupuesto. Además, incluye estrategias para el desarrollo continuo de servicios que se alineen con las necesidades cambiantes del mercado objetivo.

También aborda la evaluación continua del desempeño. Asimismo, establece indicadores clave de rendimiento (KPIs) para medir la efectividad de las estrategias implementadas, tales como la tasa de conversión, la satisfacción de la clientela y la retención. Estos KPIs sirven como herramientas para ajustar las tácticas y las ofertas de servicio según las respuestas del mercado y las necesidades de aquella.

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