¿Cuáles son las fases de un proyecto y cómo afrontarlas?
Un proyecto no siempre es fácil de gestionar, sobre todo si no tienes muy claro cómo hacerlo. En este artículo vamos a hablar precisamente de eso, de cuáles son las fases de un proyecto determinado y cómo se pueden afrontar de manera efectiva.
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¿Qué fases de un proyecto podemos diferenciar?
Un proyecto exige gestionar muchos aspectos diferentes, y esto, si no lo hacemos de forma determinada puede resultar abrumador. Pero no desesperes, según los expertos el truco es desglosar las fases de un proyecto para hacer que se pueda manejar mejor y determinar las prioridades de cada uno de los proyectos.
Fases de un proyecto: 1. Inicio
En la primera de las fases de un proyecto es en la que el equipo al completo tiene que valorarlo. Debe dilucidar y decidir si es viable y factible, si se relaciona con nuestra actividad profesional y si nos va a resultar beneficioso. Una vez lo hayamos analizado, es el momento de establecer qué alcance va a tener el proyecto, qué esperamos de él y cuáles son los clientes potenciales a los que va dirigido.
Con esto, tienes mucho ganado.
Segunda fase: la planificación
Esta es la fase de un proyecto en la que se crea el mapa hacia el éxito del proyecto. Debe contemplar metas y objetivos, costes y alcance y productos definidos.
La planificación versará acerca de cómo se van a conseguir recursos, cómo se va a lograr la calidad del producto, o cuáles son los riesgos y amenazas. Naturalmente, necesitarás una calendarización de las diferentes etapas.
Tercera fase: la ejecución del proyecto
La ejecución es la puesta en marcha del proyecto. Lo ideal es comenzar reuniendo a todo el equipo para que todos los implicados tengan claro cuál es su rol en detalle. Es en esta etapa donde se asignan los recursos y donde se empiezan a poner a funcionar y a implementar todas aquellas acciones que se han planificado y diseñado en las etapas anteriores.
Cuarta fase de un proyecto: Control y supervisión
La fase de un proyecto de supervisión va muy unida a la de la implantación y la ejecución. Ten en cuenta que mientras el proyecto va avanzando hay que ir analizando en qué estado se encuentra. Para ello, las reuniones de equipos, los informes y todas las herramientas a nuestra disposición son armas fundamentales para asegurar la correcta marcha del proyecto.
Quinta fase: finalización
Se suele decir que un proyecto acaba cuando el último producto se ha entregado y todos están adecuadamente informados sobre su final. Es muy importante que se produzca una valoración previa de forma que podamos saber qué es lo que podemos mejorar. Y, naturalmente, podremos usar ese feedback para crear procesos mucho más eficaces y eficientes.
Una parte muy importante para las empresas de cualquier sector es encontrar profesionales que sean capaces de afrontar diferentes proyectos de la forma más efectiva y más eficaz posible, y que sepan analizar cada una de las fases de un proyecto. Para eso se necesita la formación que adquirirás en nuestro Máster en Diseño de Producto.